lunes, 10 de enero de 2011

A pedido de Ingrid aquí les va el fluir de conciencia y el perro que muere

Después de que casi no distinguí la realidad de la fantasía y de botarme media tarde en suspenso en un día soleado, escurre la sangre de mis instestinos gotean las estrellas y se rebasa el límite, ésta sangre que ando botando es roja clara e indolora. Veo en la fantasía de tarde incompleta que los pajaros cantan, siendo la selección natural la que gana.
Ahora este texto se vuelve pesado, no es hipnosis lo que trato de expresarte con su humilde relajo, sino que traerte hasta a mi silla hasta dónde escribo, con mi mente retorcida de guagua enferma y hacerte sentir lo que siento ahora.
La grasa la piel y mi cabello, los ojos luego de no haberse cerrado, las rodillas tiesas, mi mente chueca junto con mi columna, el sentido de las palabras liviano, como para el día de odaliscos, cuándo me observo levanto la vista, que agradable el aire que traen a mí los aviones.
Estoy tranquilo, canto, pesado, con los dedos chuecos, recordando:

El día que habrá un perro o perra en mi vida que tiene la mirada triste, acustambrado al dolor, volarán de su mente los recuerdos más felices en que no lo sentía, el motivo de sus síntomas su "VAGINA", mientras la perra se apareó, pegada al elegido en plena copulación, traspasando sus genes al no nacido, aparecen del cielo piedras de las aves con afán de diversión, mientras tanto los palos golpean a los unidos, ambos trataron de conservar el momento, pero ya era muy tarde, el utero se le había desgarrado de donde estaba, ella no mostró motivo de dolor, sino de total cordura, ella quería que su historia fuera contada, así cansada de vivir con el utero siendo casi uno con su ano, murió atropellada por un automovil.

Creo que uno de los únicos que sintió algo de tristeza por ese animal fui yo, ya no me brindo de su olor ni de su sangre infectada, además ya nadie la pisaba sin darse cuenta que estaba ahí, mejor hubiera llamado a la ley de la selva, para que muriera antes permanentemente.


TEXTO VULGAR

No hay comentarios:

Publicar un comentario